Oaxaca: rico en cultura, historia, arte, gastronomía y recursos naturales, lejos aún del desarrollo.

Su capital con fastuosos y milenarios edificios coloniales, en un mal llamado centro histórico, con cientos o miles de puestos de vendimias fijos rodeando éste que puede ser el ejemplo de otros estados con las mismas características coloniales deja mucho que desear, el desfile de presidentes municipales algunos o la mayoría resultaron ineptos y corruptos, carentes de moral, al llenar de vicio y prostitución este centro histórico con antros, bares, cantinas y toda clase de comercios con venta de bebidas alcohólicas, aunado a ello la deambulación de sexoservidoras a pleno día y aumentando el indice de inseguridad, a esto agregamos la infame voracidad de los prestadores de servicios como los taxistas del sitio ADO que ellos aplican su tarifa, como siempre en complicidad con las “autoridades” y del interior del estado, no se diga aún no llega el detonante que falta para su desarrollo, aún faltan muchas cosas pero muchas por hacer un Oaxaca mejor.